Vida de Jesús de Nazaret

La Circuncisión y el nombre de Jesús

Cuando habían pasado ocho días del Nacimiento del Niño, fue circuncidado según la Ley judía. Se le impuso el nombre de Jesús, que era como le había llamado el ángel antes de fuera concebido en el seno de María. Este nombre quiere decir Salvador.

La Ley mandaba que toda mujer que hubiese tenido un hijo varón; permanecer en su casa durante cuarenta días y pasados estos debería presentarse en el Templo para ser purificada. Al mismo tiempo, si era primogénito, debía consagrarlo al Señor para rescatarlo luego mediante una ofrenda, llamada de la Purificación, consistía en un cordero, si los padres eran ricos, y en caso contrario en dos tórtolas o en un par de palominos. Mientras que el rescate suponía cinco siclos de plata para el templo. Para darnos ejemplo de humildad y obediencia de la Ley, tanto Jesús como María cumplieron con el precepto. El Evangelio lo narra de este modo: Y después de que se cumplieron los días de la purificación de María llevaron al Niño a Jerusalén para presentarlo al Señor y para ofrecer un par de tórtolas o dos palominos.

Apareció un hombre justo y temeroso de Dios, llamado Simeón. En el moraba el Espíritu Santo, y le había revelado que no moriría sin ver antes al Mesías. Tomó al Niño en sus brazos y bendiciendo a Dios, exclamó con júbilo:

Ahora Señor, ya tu siervo puede morir en paz:

Porque mis ojos han visto al Salvador…

Y después de bendecir a sus padres, dijo a María:

He aquí que este Niño esta puesto para ruina y salvación de muchos en Israel, y por señal de contradicción; y tu misma alma será traspasada por una espada de dolor.

Huida a Egipto

Un ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: Levántate, toma al Niño y a su Madre y huye a Egipto y estate allí hasta que te lo diga: porque ha de suceder que Herodes busque al Niño para matarle. José se levantó, tomó al Niño y a su Madre, siendo aún de noche, y huyó a Egipto, permaneciendo en este lugar hasta la muerte de Herodes. Se cumplió de este modo lo que había anunciado el profeta: De Egipto llamé a mi hijo.

Degollación de los Santos Inocentes

Herodes cuando se dio cuenta de que había sido burlado por los Magos, se irritó fuertemente y mandó a matar, degollándolos, a todos los niños de dos años para abajo que vivían en Belén y en su comarca. Poco después moría en Jericó entre terribles tormentos.

La Sagrada familia regresa desde Egipto a Nazaret

Una vez que Herodes había muerto, el ángel del Señor se le vuelve a aparecer en sueños a José y le dice: Levántate, toma al Niño y a su Madre y vuelve a tierra de Israel: porque han muerto los que querían matar al Niño. Obedeciendo a Dios, José hizo todo lo que le había indicado el ángel, pero oyendo que Arqueo, hijo de Herodes, reinaba ahora en Judea y que era sanguinario igual que su padre, temió ir allá. Avisado en sueños se retiró a tierras de Galilea, morando la Sagrada Familia en una ciudad llamada Nazaret. Se cumplió lo que anunció el profeta: Que será llamado Nazareno.

Después conocemos lo que dice el Evangelio de San Lucas: Y les estaba sujeto…y Jesús crecía en sabiduría y en edad y en gracia delante de Dios y de los hombres. Es probable que Jesús, durante su juventud se ejercitara en el oficio de carpintero, como su padre José. Es la vida oculta de Jesús de Nazaret.

  BIBLIOGRAFÍA

ZAHONERO VIVO, J. MARTÍN PENALVA, M.A. Elementos de Religión. Jesucristo según el Antiguo Testamento y según los Evangelios. Editorial Marfil. Alcoy. 1954

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LUCAS., II, 22-24

LUCAS., II, 25-39

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MARCOS VI, 3